INSINUAR SIN ENSEÑAR... CON EL ESCOTE ADECUADO

El escote es elegante, femenino y sugerente, pero sólo cuando muestra lo suficiente y destaca favorablemente lo que "descubrimos" con él...  por lo que recomendable que al momento de decidirte por algún estilo de escote, consideres éstos detalles: 

Escote Strapless: recomendado para aquellas mujeres de hombros bien formados, finos y brazos delgados. Generalmente se usa en vestidos de línea A o vestidos corte princesa.

Escote Halter en sus dos versiones: atado al cuello terminado en pico o en V, ayuda a disimular un busto generoso. La otra: cerrado al cuello, favorece un busto pequeño. Considera que la piel que muestres esté  bien cuidada.

Escote Cuadrado: favorece cuando tenemos caderas anchas, poca cintura y escaso busto... atrae la atención hacia la parte superior del cuerpo.

Escote Redondo: discreto, cómodo, en general favorecedor y juvenil, evítalo muy cerca del cuello si tienes mucho busto. Combina con cualquier tipo de manga.

Escote en V:  estiliza mucho cualquier parte del cuerpo. Hace ver más delgado un cuello ancho y corto. Favorece las curvas de un busto prominente y hombros bien delineados.

Escote de hombros caídos: es sexy y elegante. Suele ser algo incómodo porque impide el movimiento natural de los brazos.

Escote de Corazón: el más romántico de todos los escotes. No es aconsejable para mujeres bajitas, de mucho busto, de formas muy redondeadas y de cuello corto.

Escote Asimétrico, como los que dejan un hombro al aire, son ideales para potenciar hombros estrechos... y se ve bien a cualquier hora del día.

Escote de Cuello alto: sobrio, elegante y formal, úsalo preferiblemente con el cabello recogido y con aretes pequeños.

Escote Tipo ojal o "barco":  es minimalista, sobrio y elegante. Ayuda a equilibrar la figura y se recomienda en mujeres altas y con poco busto.

Maria Isabel Buendia V. / Asesor de Imagen Personal