LAS "S" DEL ÉXITO Y LA COMPETITIVIDAD

Saludable: cuida su salud mental y física, se ejercita y alimenta adecuadamente para contar con la energía requerida en su trabajo y en su vida diaria.

Sereno: maneja con inteligencia las respuestas emocionales que generan sus sentimientos y estados de ánimo. Se adapta a las situaciones, ya que actúa con firmeza o con paciencia y tacto cuando tiene que hacerlo. Evita arranques de ira que afectan sus relaciones y practica técnicas de auto – relajación.

Sincero: basa sus acciones y palabras en la ética, honestidad y justicia. Es abierto y respetuoso para expresar sus puntos de vista, con franqueza y firmeza pero con consideración.

Sencillo: se interrelaciona personal y profesionalmente con humildad y simplicidad, no desconoce su valor y sus logros, pero reconoce que puede aprender de todo ser humano y que sus éxitos se los debe en muchas ocasiones a otras personas. Evita la adulación y los lujos excesivos, sabe darle el justo valor a lo material, dentro de un ambiente de prosperidad.

Simpático: cultiva la amabilidad, la cortesía, el hablar educado y prudente. Evita la generalización y los juicios sin sustentación, trata de ser asertivo, procurando conversar con buen humor, alegría y disfrute.

Servicial: emplea el poder de la retribución y del servicio para atender  las necesidades de otros. Ve el servicio como algo honroso y valioso para su vida y la de los demás.

Sinérgico: interactúa y crea climas de cooperación y ayuda mutua en su ámbito laboral y personal. Se considera como una pieza clave del equipo, pero no indispensable, considerando la importancia de la coordinación, la humildad para aprender, la visión común, el apoyo, la creatividad y la libertad para generar acciones competitivas y exitosas. 

Ma. Isabel Buendia/ Asesor de imagen

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